¿Qué es un Webhook y para qué sirve?
Un webhook (también conocido como una llamada http web) es una técnica de programación en la que un sitio web
avisa a otro cuando un evento ocurre. En otras palabras, el sitio web 'origen' comunica a un servidor externo
(llamado servidor 'destino') que algo ha ocurrido.
Esto permite que el servidor destino registre los cambios sin
que el sitio web origen necesite interactuar manualmente con él.
Los Webhooks son un gran instrumento para la automatización. Aprovechan los puntos de conexión que ya existen
entre varios servicios para compartir datos entre ellos.
Esta tecnología ha ido aumentando considerablemente en
los últimos años debido a su potencial para agilizar el trabajo.
Los Webhooks nos permiten hacer nuestra vida
más fácil, ya que tomarán la acción necesaria sin que tengamos que estar pendientes.
¿Cómo funcionan los Webhooks?
Un webhook funciona mediante solicitud-respuesta , donde el servidor en el origen (también conocido como el servidor 'emisor') envía una solicitud HTTP donde describe un evento particular a otro servidor (el servidor receptor o destino).
Este se encargará de realizar la acción adecuada. La forma en que un webhook funcione depende de la implementación específica.
Cuando el servidor destino recibe la solicitud del servidor origen, verificará si el evento se ha producido. Si es así, realizará una acción.
Esta acción depende de lo que hayamos configurado previamente.
Así por ejemplo, podemos tener una acción programada, como enviar un correo electrónico para notificar a una persona de que algo se actualizó en el sitio web origen o activar una acción inmediata donde esperamos una respuesta.
¿Cuáles son los beneficios de los Webhooks?
Los webhooks permiten una personalización adicional de tu sitio web o aplicación. Esto significa que incluso si no hay una API establecida entre dos servicios, puedes conectar los dos usando un webhook. Los webhooks también son útiles para evitar ‘acelerar’ la API con varias llamadas. Esto significa que podemos ahorrar recursos utilizando webhooks en lugar de realizar varias peticiones a la API. Esto nos permite obtener mejores resultados y una mejor experiencia de usuario.
Los Webhooks también pueden ser útiles para tareas que requieren un procesamiento inmediato. Habitualmente tendríamos que esperar a que un usuario realice una petición web para nuestro servidor para que se efectúen ciertos cambios. Los webhooks nos permiten evitar esto, ya que se activan sin que el usuario tenga que actuar. Esta acción inmediata es extremadamente beneficiosa para aquellas empresas que requieren procesar datos de manera urgente. Esta técnica también significa que nuestros servidores funcionarán con mayor optimización.
¿Cómo se implementan los Webhooks?
La implementación de webhooks en nuestro sitio web no suele ser complicada. Lo único que tenemos que hacer es configurar uno de estos en nuestro servidor. Esto se puede hacer de varias formas diferentes, principalmente utilizando lenguajes de programación como Java, Ruby o Python. Para configurar un webhook, primero tendremos que crear una entrada con un disparador para indicar cuándo debe de activarse el webhook. Por ejemplo, podemos crear una entrada cuando alguien se suscriba a nuestro boletín. Por último, tendremos que especificar la acciones que se deben de realizar cuando el webhook se active.
Ejemplos prácticos de los Webhooks
Los Webhooks se utilizan habitualmente en integraciones de terceros. Por ejemplo, son útiles cuando un cliente ingresa a nuestro sitio y quiere realizar alguna tarea específica. También cuando un usuario puede estar interesado en comprar un producto. Si nuestro sitio se conecta a ciertos proveedores externos de productos, podríamos configurar un webhook para realizar la compra. Un ejemplo concreto es la integración de PayPal. Cuando un cliente hace un pago a través de PayPal, el webhook enviará una solicitud de verificación al servidor de PayPal. Si esta solicitud se verifica con éxito, el webhook procederá con la venta.
Los webhooks también son ampliamente utilizados para envíos de notificaciones. Por ejemplo, un usuario podría estar interesado en recibir una notificación cuando un nuevo contenido se haya publicado en un sitio web. En este caso, el webhook se encargará de detectar si el contenido se ha publicado; en caso afirmativo, el webhook enviará una notificación al usuario. Un buen ejemplo de esto son las notificaciones que recibimos cuando alguien nos responde en un foro o cuando alguien ha mencionado nuestro nombre en una publicación de Twitter. Los webhooks aseguran la rapidez en el envío de estas notificaciones.
En resumen, los Webhooks son una herramienta muy útil para automatizar tareas. Estos se activan cuando se produce un evento específico, permitiendo así realizar acciones programadas o inmediatas según nuestras necesidades.Las ventajas principales del uso de webhooks son la facilidad en la configuración, la inmediatez de la reacción a ciertos eventos y la personalización de nuestros sitios, aplicaciones y servicios. Esta técnica nos ayudará a optimizar nuestro trabajo y asegurar que los procesos no se retrasen.